El desarrollo web es el proceso de creación y mantenimiento de sitios web. Un desarrollador web es la persona
encargada de construir estos sitios utilizando diferentes tecnologías como HTML, CSS y JavaScript. Su trabajo
abarca desde el diseño de la interfaz de usuario hasta la programación de la lógica detrás del sitio.
Los lenguajes más comunes incluyen:
Frontend: HTML (estructura), CSS (estilo) y JavaScript (interactividad).
Backend: Python (Django, Flask), Ruby on Rails, PHP (Laravel), Node.js (JavaScript en el servidor).
Bases de datos: MySQL, PostgreSQL, MongoDB.
Frontend: Es la parte visible del sitio web, lo que el usuario interactúa directamente. Se enfoca en la
apariencia y la experiencia del usuario.
Backend: Es la parte del sitio web que los usuarios no ven, pero que hace que todo funcione. Se encarga de
la lógica del sitio, la base de datos y la interacción con el servidor.
Frontend: React, Angular, Vue.js.
Backend: Django, Laravel, Express.js.
Otros: Bootstrap (CSS), jQuery (JavaScript).
Un CMS (Content Management System) es un software que permite crear y gestionar contenidos web sin necesidad de
conocimientos técnicos profundos. Ejemplos populares son WordPress, Drupal y Joomla. Se utilizan para crear
blogs, sitios web corporativos y tiendas en línea.
El responsive design es una técnica que permite que un sitio web se adapte automáticamente a diferentes tamaños
de pantalla (ordenadores, tablets, móviles). Es fundamental para garantizar una buena experiencia de usuario en
todos los dispositivos.
Desarrollo Full Stack: Desarrolladores que dominan tanto el frontend como el backend.
Desarrollo de aplicaciones web: Creación de aplicaciones web complejas y dinámicas.
DevOps: Integración de desarrollo y operaciones para una entrega de software más rápida y eficiente.
Tendencias actuales en desarrollo web: Frameworks nuevos, tecnologías emergentes (como WebAssembly).